Viajar a Belo Horizonte depara gratas sorpresas gracias a su vistosa arquitectura, sus paseos ecológicos y sus famosos bares. El turismo en Belo Horizonte se define por su despliegue de matices.
Los edificios de la época colonial se mezclan con los grandes rascacielos y con las impactantes obras modernas del arquitecto Oscar Niemeyer. Como marco, la bella Serra do Curral y una inmensa riqueza ecológica que es preservada en numerosos parques y reservas.
En el centro de Belo Horizonte se concentran numerosas actividades culturales. Las tradiciones mineiras adoptan un espíritu cosmopolita en las coloridas calles de Savassi, los sofisticados restaurantes de Lourdes, la interminable Feria Hippie de la Avenida Alonso Pena, el interesante Palacio das Artes o las encantadoras Plazas do Papa, da Liberdade o Rui Barbosa.
Por la noche, la “capital brasileña de los bares” (con el mayor número de bares por habitante) tiene incontables opciones para disfrutar de la tradicional cachaça artesanal o de las sabrosas especialidades de Minas Gerais.